jueves, 29 de diciembre de 2011

RECONOCIMIENTO HISTÓRICO Y

MORAL PARA TODOS LOS

CAMARADAS

DE LA ASOCIACIÓN 6 DE ABRIL


POR

MALVINAS DE BERAZATEGUI



En el día de ayer nuestros compañeros de la Asociación 6 de Abril por Malvinas de Berazategui, fueron reconocidos por el Municipio y el Concejo Deliberante de Berazategui, Este es el fruto de un trabajo arduo que viene llevando a cabo esta Asociación, fueron recibidos por   el Señor Secretario de Gobierno Gustavo Campos, el Señor Subsecretario de Gobierno Jorge Amarilla, el Señor. Director General de Entidades de Bien Publico, Marcelo Benedetti y el Señor. Concejal,  presidente del Bloque del Frente Para la Victoria y HÉROE DE MALVINAS OMAR ACOSTA (VGM)

Estas son algunas de la fotos. Fuente Sr. Nino Morales.





















FELICITACIONES    CAMARADAS Y AMIGOS DE BERAZATEGUI......

viernes, 9 de diciembre de 2011


Un soldado inglés le devuelve a uno argentino su 

cámara de fotos

 ANSIOSO. Marcelo, en su casa, a la espera del viaje (Fernando Pérez Re).


Edición impresa. Casi treinta años después del conflicto
de Malvinas, el ex combatienteMarcelo Llambías recibirá
en la jornada del sábado en las islas la máquina que le
habían quitado sus captores, informa el Diario Crónica.
Por Mercedes Ninci
Marcelo Llambías era un cadete de la Escuela Militar que a
los 21 años fue enviado a la Guerra de Malvinas. Combatió
en el cerro Dos Hermanas a 15 kilómetros de Puerto Argentino.
Allí, luego de un virulento cruce con la Unidad Nº 45 de Royal
Marines, perdió su mochila con una vieja máquina Kodak con
la que había logrado retratar varios momentos de la guerra.
Pensó que esos recuerdos no los vería más, hasta que este
año, un amigo le avisó que se había publicado en Inglaterra
un libro llamado “Pictures from far away”, donde aparecían
aquellas fotos.
El soldado que encontró la cámara, y que luchó contra él,
había entregado el rollo a una editorial británica. Se llama
Nick Taylor. A través de varios foros relacionados a la
Guerra de Malvinas, se vincularon por mail y mañana se
conocerán en el mismo lugar donde lucharon en 1982 y donde
Marcelo fue tomado prisionero. Allí, Taylor le devolverá la
máquina de fotos y el rollo revelado.
Llambías está alejado desde hace más de diez años del
ejército, y hoy es abogado penalista. Ayer, mientras preparaba
el equipaje, desbordado por la emoción, recibió a Crónica
en su casa de Las Cañitas junto a su esposa, Stella De la 
Vega, para contar por primera vez a un medio esta increíble
historia, a casi 30 años de la guerra.
-¿Cómo te enteraste de que las fotos todavía existían?
-Hay un inglés que decide hacer un libro con fotos de la Guerra
de Malvinas con marinos, marineros, soldados. Fotos personales
que cada uno sacó. Y en las últimas hojas están las fotos del
infante de marina británico Nick Taylor y a continuación son las
fotos que yo saqué en Malvinas. Nick las encuentra en mis
posiciones de combate, se lleva mi cámara, las revela. El autor
del libro hace una especie de paralelismo entre las fotos de Nick
y las mías, desde que empieza la guerra hasta el momento del
combate. Como que los dos vivimos en lados opuestos las mismas
experiencias. Y Nick dice en el libro “a mí me gustaría saber de
quién son estas fotos para devolvérselas en persona”. Yo tengo
un amigo que toma contacto con gente por distintos foros de
Internet y una persona les reenvía las fotos desde Inglaterra
diciendo que podrían ser del Regimiento 4. El se da cuenta que
soy yo y me avisa. Después le llega mi dirección de correo a Nick,
que es el que encontró mis fotos. Me dijo que me quería devolver
las fotos. Lo invité a la reunión que hacemos todos los años los
veteranos y me dice que quería darme las fotos en las Islas
Malvinas. Mañana (por hoy) salgo por Lan Chile a las 19.
Estas fotos pensé que no existían más. Pensé que se había
destruido la cámara por las balas o por el clima, la nieve,
la lluvia. Nunca creí que eso iba a aparecer. Con Nick nos
hemos tirado el uno al otro, pero él tuvo este gesto impresionante.
La historia me parece increíble.
-Igualmente los dos obedecían órdenes.
-Sí, por supuesto, cada uno estaba luchando por su país.
Y no hay rencores, porque en la Guerra de Malvinas no
hubo crímenes de guerra por ninguno de los dos bandos.
Más allá de la violencia natural de la guerra, no quedan
resentimientos, porque tanto el ejército argentino como
el británico se comportaron de manera profesional.
-¿Qué sentís al volver por primera vez a Malvinas?
-Es raro. Son sentimientos contradictorios, porque primero
estaba recontento que volvía. Ahora estoy angustiado de
volver a los lugares, de recordar momentos que fueron muy
intensos, ¿no?
-¿Qué sentiste cuando viste las fotos por primera vez?
-No lo podía creer. Hubo fotos que me hicieron acordar de
cosas que había olvidado. La verdad es que fue una emoción
tremenda. Yo estaba en otro planeta, fotos que yo creí que
no existían, ya no me acordaba ni qué había sacado.
PUBLICADO POR CRONICA.COM